- Morris Hohen
Marketing de contenidos
El marketing de contenidos es una estrategia de marketing que ofrece contenidos de alta calidad que aportan valor a los clientes potenciales. El contenido es normalmente entretenido e informativo. El anunciante se "gana" la atención de los clientes a través de un buen contenido. El marketing de contenidos es una de las herramientas más importantes del inbound marketing.
Marketing de contenidos - Visión general
La gestión de contenidos implica la creación de contenidos para un grupo objetivo especÃfico. El contenido de valor pretende atraer a clientes potenciales interesados en los productos o servicios que ofrece el anunciante.
De este modo, la marca o empresa espera que algunos de los visitantes se conviertan en clientes. En el mejor de los casos, se mantendrán fieles a la marca o empresa a largo plazo y también se convertirán en defensores en las redes sociales. Un buen marketing de contenidos puede ser muy rentable para la empresa a largo plazo y no es necesario llamar a una agencia.
Importante instrumento de inbound marketing
En sentido figurado, el cliente se acerca al vendedor por su contenido de alta calidad. No se aborda activamente al cliente potencial y se "compra" su atención, por ejemplo, con la ayuda de anuncios publicitarios.
"Inbound" significa "entrante". De este modo, el inbound-marketing puede distinguirse claramente de otros métodos de marketing que se basan en medidas publicitarias "de salida" (outbound-marketing).
En estos métodos publicitarios, la publicidad se dirige a clientes potenciales que a menudo aún no buscan activamente los productos o servicios del vendedor. Mientras que el inbound marketing utiliza una estrategia de "pull", el outbound marketing utiliza una estrategia de "push".
Ejemplos tÃpicos de este tipo de publicidad son:
- Publicidad en banners,
- publicidad en la radio,
- Publicidad en televisión,
- la publicidad directa,
- anuncios en los periódicos,
- Spam-Mails,
- folletos
Lo caracterÃstico de estos anuncios es que no contienen información útil para el cliente. El contenido es predominantemente promocional y no es rico en información.
Marketing de contenidos - campos de aplicación
El marketing de contenidos se utiliza cuando el objetivo es ofrecer al cliente un claro valor añadido. Esto puede adoptar, por ejemplo, las siguientes formas:
- VÃdeos de bricolaje
- conferencias
- InfografÃa
- ArtÃculos profesionales (textos)
- Descargas gratuitas
- Libros electrónicos
- estudios
- Potcasts
- GuÃas
- Whitepaper
Por supuesto, no siempre se trata de proporcionar información útil. Algunos contenidos también deben simplemente entretener. Se pueden contar historias interesantes que despierten emociones y cautiven al lector o al espectador. Para ello se suele utilizar la metodologÃa de la narración (Storytelling).
A la gente le encantan las historias que entretienen y despiertan emociones. Las raÃces de la narración son antiguas y se encuentran en el mundo de los mitos, las fábulas y los cuentos de hadas. Un ejemplo mundialmente conocido es el héroe griego Odiseo con sus atrevidas aventuras.
Hoy en dÃa, estas historias se cuentan cada vez más en forma de vÃdeos, por ejemplo, de los Youtubers. El contenido informativo y entretenido que los Youtuber suben a sus canales hace que las personas interesadas vean los vÃdeos de producción propia (estrategia "pull").
Marketing de contenidos - tipos
El marketing de contenidos siempre trata de producir contenidos valiosos e interesantes. El contenido debe destacarse de la competencia y ser fácil de encontrar en los motores de búsqueda y social media.
El marketing de contenidos puede dividirse a grandes rasgos en dos tipos: Por un lado, está el marketing de contenidos que tiene como objetivo principal dar a conocer la marca (aumentar el conocimiento de la marca). Por otro lado, el marketing de contenidos suele funcionar para crear credibilidad y, en su caso, el estatus de experto (credibilidad).
Marketing de contenidos - Emergente
El marketing de contenidos ganó importancia principalmente porque las herramientas publicitarias tradicionales perdieron eficacia. Los consumidores comenzaron a rechazar la publicidad intrusiva. Por otro lado, se produjo un efecto de "ceguera publicitaria". Los receptores de la publicidad veÃan y oÃan la publicidad, pero apenas la percibÃan conscientemente. Para atraer la atención de los clientes potenciales, se hicieron necesarios presupuestos publicitarios cada vez más elevados. Las inversiones en publicidad convencional son cada vez menos rentables.
Marketing de contenidos y social media
Con la ayuda de social media como Facebook, Twitter, LinkedIn e Instagram, es comparativamente fácil dar a conocer su contenido.
Una publicación vinculada al contenido de su propio sitio web simplemente se publica en los canales sociales.
Es importante definir con precisión su grupo objetivo y conocer los canales de social media en los que pasan el tiempo. Por regla general, la atención se centra en los principales canales. En el sector B2B, los canales especÃficos del sector también pueden ser interesantes, siempre que se pueda demostrar que un número suficiente de personas del grupo objetivo pasan por allÃ. También puede tener sentido tener un blog propio que trate temas especÃficos de los productos.
El acercamiento a los seguidores debe ser siempre adecuado. En este sentido, hay una gran diferencia si el contenido se distribuye en el ámbito B2B o B2C. En el sector empresarial, el tono profesional se da por supuesto. Con los consumidores, es más importante comunicar en el tono del grupo social. Los términos que se utilizan con frecuencia en la escena también deben utilizarse para reforzar la identificación con la marca o la empresa. Sin embargo, la empresa debe seguir siendo creÃble.
Los conflictos deben tratarse con rapidez y profesionalidad, de lo contrario podrÃan convertirse en una "shitstorm" en el peor de los casos. Por lo tanto, Facebook, Instagram, LinkedIn, Twitter y el propio blog de la empresa también deben ser supervisados durante los fines de semana.
Al crear los distintos artÃculos, asegúrese de seguir optimizándolos:
- ¿En qué tema ha tenido éxito un artÃculo?
- ¿El texto era más profundo o estaba más preparado?
- ¿El texto estaba escrito de forma más entretenida o era puramente informativo?
- ¿Cómo fue el "compromiso" de los lectores?
- ¿En qué medida han cambiado el tráfico, los clientes potenciales o las ventas?
En general, se recomienda un análisis exhaustivo de toda la información disponible. De este modo, se puede comprender mejor al grupo objetivo y, en última instancia, el marketing en redes sociales puede tener más éxito.
Marketing de contenidos y SEO
Hoy en dÃa, por desgracia, incluso un contenido muy bueno apenas es visible si no se lleva a cabo una optimización profesional de los motores de búsqueda (SEO). Esto es especialmente cierto para los sitios web que aún son relativamente nuevos. Sólo si el contenido también se encuentra bien a través de los motores de búsqueda como Google y Bing, el marketing de contenidos puede alcanzar su objetivo de éxito a largo plazo.
En SEO, se hace una distinción fundamental entre las medidas OnPage y OffPage. El SEO OnPage se centra en medidas de optimización técnica y de contenidos. Por ejemplo, se puede aumentar la velocidad de carga del sitio web comprimiendo los elementos de imagen. El diseño del sitio web fácil de usar para los dispositivos móviles también es esencial para Google.
Además de estos factores técnicos, la redacción de textos optimizados para los motores de búsqueda con las palabras clave pertinentes es un factor importante para el éxito de los contenidos. Hay que prestar atención a los titulares y a una meta descripción atractiva que incluya la palabra clave. Las imágenes y, en su caso, los gráficos también son elementos importantes y deben llevar el nombre de la palabra clave. Cualquier contenido duplicado (onpage y offpage) debe evitarse a toda costa.
El SEO OffPage se centra en la vinculación del sitio web. Es especialmente importante prestar atención a la relevancia y la calidad de los sitios web que enlazan. Google valora los enlaces externos hacia el propio sitio (backlinks) como una recomendación de otros para el propio sitio web. A largo plazo, esto mejora la visibilidad en los motores de búsqueda como Google y Bing y facilita que los interesados encuentren los contenidos propios.
